Descripción
Cuando entendí el juego que hacían Katty West y su novio no me lo podía creer. Estábamos en una fiesta, yo no los conocía de nada y, de pronto, la morena salió al balcón. Cuando pasó por al lado mío me sonrió, así que la seguí. Afuera estábamos los dos solos, así que empezó a coquetearme. Me contó que su novio estaba adentro, pero también que estaba demasiado cachonda. Entonces se puso a masturbarse frente a mí, enseñándome el coño con las piernas bien abiertas. Ese chocho era una invitación a follarla, así que me la follé ahí mismo sin importarme nada. Cuando descubrí que el novio nos estaba espiando entendí todo. Yo, que pensaba que le estaba jodiendo la chica a aquel chaval, resulté ser el juguete sexual de la pareja.