Descripción
La enculada entre estos dos bisexuales es tremenda, ya que de pronto se encuentran en un callejón y enseguida se dan cuenta de que a los dos les gustan las pollas. Ambos estaban cachondos en busca de rabos, así que empezaron a masturbarse y el mas gay de los dos a los pocos segundos ya estaba de rodillas mamándole la polla al otro. Después se puso de pie, se volteó, puso las manos contra la pared y, con el culo en pompa, recibió toda la polla del otro tío, quien le hizo un anal para el campeonato corriendo el riesgo de que cualquiera pudiera pillarlos.