Descripción
Las tetas de Emmanuelle London son tan grandes y redondas que deberían hacerles un monumento. Esos melones tan perfectos y esculturales son el deseo de cualquier hombre, y Mike Adriano lo comprobó en carne propia cuando los tuvo a su alcance. Apenas la morena se quitó la ropa dejando ver sus enormes domingas, a Mike se le puso la polla dura como una piedra. Lo primero que se le ocurrió fue embadurnárselas en aceite y meter la polla entre las dos para que le hiciera una rica paja cubana. Después, la puso a comerle el rabo y acabó follándosela en la postura del perrito, como a Emmanuelle tanto le gusta.