Descripción
Nunca tuve tanta suerte como el día en que la oportunidad de desvirgarle el culo a mi compañera del instituto se me presentó de repente. La situación fue insólita. Ese día por la noche, ella tenía una cita con un tío del que estaba tan enamorada que pensaba entregarle su virginidad anal. De repente, se enteró de que el cabrón ya se había follado por el culo a varias de sus amigas, y decidió dejar de ser virgen del culo antes de la cita. ¿Quién estaba esa tarde en su casa? Pues, yo. ¿Sabéis quién le rompió el culo por primera vez? Adivinasteis. El mendas.
Categorías