Descripción
A mí me bastaba con que me miraran la polla para excitarme. Ese era el único objetivo que tenía cuando me puse a masturbarme en el bosque esperando a que me pillaran algunas turistas. Jamás me imaginé que una madura, al descubrirme, vendría directo hacia mí y cogería mi polla para cascármela. Menos aun que después de eso me la chuparía, se bajaría el pantalón y las bragas, se la metería en el coño y, después de follármela, volvería a chupármela hasta sacarme la leche. Al final, la zorra acabó siendo más guarra y pervertida que yo. Esa fue mi primera follada en el bosque.