Descripción
Ningún hombre en toda la Argentina le ha perdonado el culo a Barbie Rivas. Ni siquiera sus hermanos. Todo el mundo sabe que esta turra argenta es una adicta al sexo anal, y le encanta que le rompan bien el orto. En sus redes hay montones de videos suyos en donde están orteándola, así que sus hermanos se preguntaron cómo era que ellos aún no se la habían culeado. Ese día fueron a su casa, la pusieron contra el placard y empezaron a turnarse para cogérsela por el culo un rato cada uno. Después le hicieron una doble penetración para que la trola gozara hasta acabar. Después de dejarse ortear por los dos, se lo merecía.