Descripción
La zorra de mi hermana me tiene harto. A la guarra le encanta pasearse con mi ropa puesta, en especial los calzones y las camisas. Hasta ahora siempre le había dicho de buenos modales que dejara de usarla, pero ayer lo hizo a propósito para provocarme. Me sentí tan burlado que empecé a quitársela yo mismo y, cuando la tenía casi desnuda, le ordené que terminara de quitársela o le metería un dedo en el coño. ¡Ni se inmutó la muy guarra! No solo la desnudé y le metí el dedo, sino que también me la follé hasta correrme. A partir de ahora, mi hermana será mi puta para siempre y la usaré cuando quiera, le guste o no. Como ella hace con mi ropa.
Categorías