Descripción
Fue muy duro para mí enterarme de que mi esposa me engañaba con el amigo, pero lo peor fue todo lo que vino después de eso. Primero, porque me enteré a través de un video que grabaron follando juntos en un hotel. Eso me produjo una profunda decepción, ya que verla cabalgarle la polla, poniéndose a cuatro patas para que se la folle como a una perra y mamándosela como si fuese el último rabo sobre la faz de la Tierra, me hizo sentir muy mal. Segundo porque, como no se le ve el rostro en ningún momento, me niega que es ella y, tercero, porque pagaron el hotel con mi tarjeta de crédito.