Descripción
A mi prima y a mi nos costó mucho decidirnos a echarnos el primer polvo. Fueron años de coqueteo hasta que por fin no animamos a pasar de los morreos al sexo. Desde entonces, aunque ambos tengamos pareja, siempre quedamos para follar. Ahora, que estamos los dos solos, tuvimos una gran idea. Se nos ocurrió ir juntos a un club liberal, hacernos pasar por pareja y follarnos a todo Dios. ¡No os podéis imaginar lo mucho que me excité viendo como se la follaban varios tíos uno tras otro! Yo también tuve lo mío. Me hicieron unas cuantas mamadas y me follé a un par de zorras. Al regresar a casa, nos pusimos a follar recordando la excitante experiencia.