Descripción
Javier era su primo, hacían todo juntos desde niños, crecieron juntos y no había secretos entre ellos, por lo que cuando ambos decidieron vivir juntos, nadie sospechó que había algo perverso y misterioso entre ellos. A medida que ambos crecieron, se dieron cuenta de que no podían estar con nadie más que consigo mismos, que no importaba nada más que jugar juntos, hablar de todo y, por supuesto, experimentar lo que se les ocurriera en el ámbito sexual. Así que cuando entró al cuarto de lavado y encontró su hermoso trasero puesto en pompa al aire libre, aprovechó la oportunidad y reaccionó divertidamente ante la idea de apuñalarlo y así es como la penetró y le terminó haciendo sexo anal.