Descripción
Ni en el mejor de los sueños el doctor se imaginó que alguna vez lograría cumplir la fantasía de follarse a una madre y a una hija juntas. Por eso, cuando la guarrilla rubia se puso a hacerle una mamada delante de la madre, le costó convencerse de que no estaba teniendo un sueño. La situación era tan perfecta que parecía increíble, y más aun cuando la madre, excitada por el espectáculo que le estaba dando la hija, decidió desnudarse y unirse a ellos. ¿Cómo iba a imaginarse el doctor que madre e hija se pondrían a comerse los coños mutuamente mientras él se las follaba? Sin dudas, este trío lésbico e incestuoso ha sido la experiencia sexual más fuerte de su vida.