Descripción
Una vez mas, el marido de Ariana Marie la traicionó haciéndole creer que pasarían las vacaciones juntos. Como siempre, el trabajo le impidió viajar a tiempo, y pretendía que ella volviera a pasárselas todo el día sola en la piscina, como si eso fuera lo mismo que estar acompañada. Ariana se puso la bikini nueva que él le regalo y se fue a nadar a la piscina… pero decidida a aceptar cualquier propuesta que le hicieran. Tuvo suerte de que el único tipo que estaba allí fuera un negro tan guapo como polludo. Apenas salió del agua, la llevó a su cuarto, la puso a comerle la polla y le echó un polvo de muerte. ¡Qué bien merecido se tenía el marido que la morena le pusiera los cuernos!
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