Descripción
Mientras Annabel Redd posaba sensualmente y se quitaba la ropa, Johnny Love se regodeaba pensando en que, minutos después, sus enormes tetas le pertenecerían. Es que la pelirroja tiene un par de melones inmensos que son la delicia de cualquier hombre. Es imposible resistir la tentación de chupárselos teniéndolos enfrente. Johnny, además, quería follársela bien follada cabalgando sobre su tranca para ver sus domingas botando sin cesar. La follada que le dió fue impresionante. Apenas se quitó la ropa la puso a comerle la polla y se calentó tanto que enseguida decidió penetrarla.
Categorías
