Descripción
Esta señora dudaba mucho de que pudiera volver a conseguir un trabajo. A su edad, no era nada fácil que la contrataran, pero ese día iba vestida tan sexy y guapa que logró poner cachondo al chaval que la estaba entrevistando y, finalmente, consiguió el curro. Claro que para eso tuvo que dejarse meter mano, desnudarse, chuparle la polla y dejarse follar. La verdad es que no se lo pasó nada mal, ya que hacía tiempo que nadie se la follaba. Sin embargo, sentirse una puta por haberse dejado follar a cambio de un trabajo como mujer de la limpieza, no le hizo mucha gracia.